Heriberto Cano, un viaje a la música y fotografía

*Tiene 31 años como fotógrafo, ha recibido un sinfín de premios nacionales e internacionales, pero su gran pasión es la música y su sueño era que la gente lo escuchara cantar

Antonio Zamora

Puebla, Pue.- “Fui famoso en un mundo chiquito”, son las palabras de Heriberto Cano, artista poblano que ha dedicado gran parte de su vida a la música y a la fotografía. Recibió varios reconocimientos en ambas actividades y ahora se dedica a instruir al talento emergente detrás de la lente y a cautivar a comensales e invitados con shows musicales.

Heriberto tiene 31 años como fotógrafo, ha recibido un sinfín de premios nacionales e internacionales, montado más de 40 exposiciones individuales, pero realmente se involucró en la fotografía por necesidad, porque su gran pasión fue la música, su gran sueño era que la gente lo escuchara cantar o que alguien más cantara sus creaciones.

“Yo antes de fotógrafo soy cantante. Todos los sueños empiezan cuando eres chico, estaba en la secundaria y formé una banda con dos amigos y mi hermano; tocaba la batería, pero yo quería cantar. Entré a estudiar al Conservatorio, ahí estudié piano, guitarra y me especialicé en el violonchelo. Estuve en la Sinfónica de Puebla, entré como chocomilk (cargador), pero pude tocar percusiones. Todo esto lo hice sin dejar el sueño de cantar”.

La fe mueve montañas y sus ganas de convertirse en cantante lo llevaron a acercarse a las editoras de discos en Ciudad de México para dejar sus composiciones, y mientras se mantenía tocando en bares y hasta en los camiones.

“Anduve brincando muchos años en el arte, también estudié teatro, me fui a Bellas Artes con unos amigos, pero yo quería ser famoso y que me escuchara todo el mundo, por eso me fui a México para acercarme a las editoras de discos para que me escucharan, pero mientras agarraba mi guitarra y me iba a cantar a los camiones con eso sacaba para comer”.

Uno de los momentos cumbre de su carrera como compositor llegó en un concurso en el que fue seleccionado su material para que lo cantara Arturo Vázquez, el hijo de Alberto Vázquez. Y si bien le hizo algunas modificaciones, grabó la canción ‘troncomovil’ escrita por este talentoso poblano.

“Después de que grabó la canción pensé que ya la había hecho, ya me había elegido otras canciones para grabarlas, pero sin aviso se fue a Los Ángeles y se acabó. Después pude tener algunas giras por la República cantando en bares y restaurantes. También me metía en concursos para promocionar mis canciones”.

Sin embargo, el ‘trancazo’ que esperaba lograr en la música nunca llegó y ya con la responsabilidad de tener una familia, tuvo que desistir del sueño y dedicarse a la fotografía, una habilidad que desarrolló con esmero estudiando la maestría otorgada por la Sociedad Mexicana de Fotógrafos Profesionales.

“Un día llevé mi cámara a la escuela de mis hijos para fotografiarlos, unos papás se acercaron para que fotografiara a sus hijos, en un principio les dije que no, pero después me di cuenta que podría ser una buena forma de obtener dinero y así inicié en la fotografía”.

Desde entonces se convirtió en fotógrafo profesional pasando por varios perfiles, desde retratista, hasta fotografía de desnudos artísticos, y el más reciente es el de documentalista, pues además de capturar momentos de lucha libre, desde hace 14 años rescata en imágenes la danza de Los Paxtles en el municipio de Chignautla con el propósito de plasmarlo en un libro.

Si bien la pandemia y problemas de salud pausaron su actividad, ahora está de vuelta y de a poco quiere reincorporarse ofreciendo talleres de fotografía y también a ofrecer shows como cantante en el que ofrece un amplio repertorio de covers y canciones propias.

“En mi época de cantante y compositor mi nombre artístico era Pável, ya como fotógrafo me mantuve con mi nombre y todas mis creaciones están en Instagram como @heriberto_cm, también en Facebook como Heriberto Cano, o también mi canal de Youtube en donde subo mis canciones”.

 

 

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